Uno dice al día tantas mentiras como tías se ha follado James Bone. ¿O tal vez James Bone no se ha follado nada y todo es mentira?
Por la mañana cuando nuestro cerebro se activa a través del peor invento que el hombre ha creado en la faz de la tierra, o sea el despertador, ya nos mentimos a nosotros mismos:
- Va cinco minutos más, solo cinco más, entre las sabanas..
Pero ya sabemos que no son sólo cinco minutos.
Hubo uno que dijo: ¡Va! Un ratito más.
Y el tío nunca más se despertó. Dios lo castigó. Cuando llegó al infierno ‘el Todo Poderoso’ le dejó una nota que ponía; “Estas aquí por capullo y por cagarte en mí, todas las mañanas.” Y yo pensando que Díos no era vanidoso.
Después de haberte sobado un rato más de la cuenta te diriges al baño pensando que el día siguiente no te va a pasar lo mismo. ¡Mentira!!!
Lo ves, otra mentira.
Cuando empiezas a tomar consciencia suena el teléfono, y efectivamente es tu jefe. Entonces antes de descolgar, cantas y gritas en voz aguda para contrarrestar la voz de camionero que se te pone por la mañana.
La mejor mentira es abrir la ventana que da a la calle y hacer ver que estas en ella.
- Si dígame….(como si no supieras que es tu jefe),
-Si hola Jefe! Es que se me han caído las llaves del coche por la ranura del ascensor y acaba de venir el técnico justo para abrirme la puerta y acceder al hueco y así recuperar las llaves y llegar a tiempo…
El jefe que ha estado callado escuchando las tonterías le dice:
-¡Mira chaval! Tu ascensor debe tener un imán de cojones en el hueco, haber si te haces unas llaves de latón y te inventas otra excusa.
El jefe dijo excusa por no decir mentira, hay que estar muy seguro para afirmar que algo es mentira.
Aunque es igual, ese día le dices esa trola o excusa a tu jefe sabiendo que el a ti también te ha mentido.
Como aquel día laborable que paseaba por el centro buscando un bar para sentarme y tomar una caña y…. en una terraza vi a mi jefe y a su secretaria, cogiditos de la mano y dándose besitos. Claro yo no podía decirle nada, por la mañana ya le había mentido diciéndole con la voz pertinente de enfermo que me encontraba mal. La diferencia es; que pillé a mi jefe y él a mi no. ¿O tal vez el también me vió pero prefirió mentir para proteger otra mentira más grande?
Y la verdad es que 1 mentira tapa otra mentira, y a otra,..
Por la mañana cuando nuestro cerebro se activa a través del peor invento que el hombre ha creado en la faz de la tierra, o sea el despertador, ya nos mentimos a nosotros mismos:
- Va cinco minutos más, solo cinco más, entre las sabanas..
Pero ya sabemos que no son sólo cinco minutos.
Hubo uno que dijo: ¡Va! Un ratito más.
Y el tío nunca más se despertó. Dios lo castigó. Cuando llegó al infierno ‘el Todo Poderoso’ le dejó una nota que ponía; “Estas aquí por capullo y por cagarte en mí, todas las mañanas.” Y yo pensando que Díos no era vanidoso.
Después de haberte sobado un rato más de la cuenta te diriges al baño pensando que el día siguiente no te va a pasar lo mismo. ¡Mentira!!!
Lo ves, otra mentira.
Cuando empiezas a tomar consciencia suena el teléfono, y efectivamente es tu jefe. Entonces antes de descolgar, cantas y gritas en voz aguda para contrarrestar la voz de camionero que se te pone por la mañana.
La mejor mentira es abrir la ventana que da a la calle y hacer ver que estas en ella.
- Si dígame….(como si no supieras que es tu jefe),
-Si hola Jefe! Es que se me han caído las llaves del coche por la ranura del ascensor y acaba de venir el técnico justo para abrirme la puerta y acceder al hueco y así recuperar las llaves y llegar a tiempo…
El jefe que ha estado callado escuchando las tonterías le dice:
-¡Mira chaval! Tu ascensor debe tener un imán de cojones en el hueco, haber si te haces unas llaves de latón y te inventas otra excusa.
El jefe dijo excusa por no decir mentira, hay que estar muy seguro para afirmar que algo es mentira.
Aunque es igual, ese día le dices esa trola o excusa a tu jefe sabiendo que el a ti también te ha mentido.
Como aquel día laborable que paseaba por el centro buscando un bar para sentarme y tomar una caña y…. en una terraza vi a mi jefe y a su secretaria, cogiditos de la mano y dándose besitos. Claro yo no podía decirle nada, por la mañana ya le había mentido diciéndole con la voz pertinente de enfermo que me encontraba mal. La diferencia es; que pillé a mi jefe y él a mi no. ¿O tal vez el también me vió pero prefirió mentir para proteger otra mentira más grande?
Y la verdad es que 1 mentira tapa otra mentira, y a otra,..
2 comentarios:
pero petxis... si tu no tens jefe (que jo sàpigui....)
Si Christian! Tinc de jefe a John Wayne i Samuel L. Jackson.
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